Estamos a unos días de empezar una nueva etapa escolar. Y con ello la vuelta a la rutina y mejor organización en lo que a las comidas se refiere.
El desayuno muchas veces se vuelve un comedero de cabeza por intentar querer ofrecer cosas distintas pero a la vez sanas. Y esa lucha por evitar las cosas que nos piden de lo que ven de sus compañeros. A veces el usar recursos y hacer formas divertidas, vuelve mucho más atractivo los desayunos. Algo muy importante es que ellos participen en la preparación o eligiendo lo que van a querer, les emociona mucho comerse algo que ellos mismos han preparado, o sabiendo lo que van a encontrar en la fiambrera sin sorpresas.
Aquí os comparto algunos de los desayunos que le preparé el año pasado a mi pequeña durante el curso de P3 por si os ayuda y os dan ideas a realizar los vuestros. Aunque todos los días llevaba fruta, el único día a la semana que se recomendaba solo fruta era los Miércoles, entonces elegíamos 2 o 3 tipos distintos.
Estas son algunas de las variaciones que hemos hecho durante el curso.
Me gustaría aclarar algunos puntos:
El Chocolate que usamos tienen un porcentaje del 85% o alguna vez del 72%.
Intento siempre hacerlo en casa y que sea integral tipo panecillos o en la panificadora. Aunque alguna vez también hemos comprado los típicos panecillos redondos de panadería que les encanta!
Siempre miro que sus ingredientes sean: leche de oveja o vaca, fermentos lácteos y cuajo.
Todos los alimentos de tamaño pequeño y redondo como la uva, debería cortarse en 4 partes en forma alargada o por la mitad si ya es más grande. Como veis en las imágenes, no siempre se las he puesto cortadas de esta manera, la verdad es que siempre me he fiado de como se las come Lia porque sabe gestionarlas bastante bien. Pero no está de más seguir haciendo este tipo de corte. Se aconseja cortarlo de esta manera hasta mínimo los 3 años.
Todas las fiambreras las podéis encontrar en la Shop de Había una vez ;)